La terapia ocupacional es una de las muchas actividades que se desarrollan, por profesionales especializados, en las residencias para mayores. No es una actividad específica de la geriatría pero tiene bastante relación y puede ser muy útil para las personas mayores. Es más, la mayoría de residencias la incluyen.
Lo más importante es distinguir la terapia ocupacional de los talleres de manualidades que se ofrecen en los centros. Muchas veces esas manualidades dan soporte a ámbitos que podrían estar relacionados con los objetivos de estas terapias ocupacionales pero no tienen nada que ver. Por lo que si se ofrece ese servicio hay que tener en cuenta que no es terapia ocupacional y que simplemente existe un monitor o técnico de animación social en el centro.
¿Qué es la terapia ocupacional?
Podría definirse como un conjunto de técnicas o actuaciones que persiguen el objetivo de potenciar al máximo las capacidades funcionales de las personas mayores, así como desarrollar las capacidades residuales y compensar los déficits no recuperables. El principal objetivo es conseguir el mayor grado posible de independencia funcional en una persona mayor.
Dicho de otra forma, la terapia ocupacional en geriatría se ocupa de aumentar la calidad de vida de los ancianos mediante ciertas herramientas que mejoran su salud. Por norma general se valora el caso de cada persona, se analiza bastante bien su situación, cuál es su capacidad para realizar actividades cotidianas, sus funciones cognitivas y se le ofrece un plan personalizado para mejorar aquello en lo que más flojea.
¿En qué ayuda la terapia ocupacional en las personas mayores?
Realmente ayuda tanto a la hora de realizar actividades básicas, como actividades de ocio y tiempo libre, entre muchas otras cosas.
– Actividades básicas diarias: da apoyo a aquellas actividades que se refieren al autocuidado. Es decir a bañarse, a vestirse, a asearse, etc.
– Actividades instrumentales de la vida diaria: también da apoyo a aquellas actividades que están relacionadas con el entorno. Es decir: al cuidado de los otros, a saber comprar, a moverse en comunidad o a saber utilizar el teléfono, por ejemplo.
– Actividades de odio y tiempo libre: a saber hacer actividades con las que se sigan autodesarrollanndo (dar paseos, hacer excursiones o jugar a juegos de mesa, etc).
– Estimulación funcional: es la estimulación de las capacidades y habilidades que permiten hacer todo lo que acabamos de comentar. Es decir, con la terapia ocupacional se estimula el esquema corporal, la psicomotricidad, la lateralidad y la integración sensorial, entre otras cosas.
Al final, en resumen, cuando una persona se hace mayor pierde ciertas habilidades ya sea por la edad o porque por comodidad. La realidad es que dejan de hacer actividades diarias porque otra persona las hace por ella, por ejemplo. Y es importante que aprendan a ducharse por si mismos o que aprenden que deben tener una higiene. Al igual que es importante que sepan que deben tomarse su medicación, distraerse, etc. Al final: deben ser autónomos dentro de sus limitaciones y un terapeuta ocupacional ayuda a conseguirlo.